Levaduras, científicos y otras yerbas

Historias que involucren levaduras, aventuras del pensamiento y unos mates.

My Photo
Name:
Location: Parque Chas, CABA, Argentina

Docente e investigador

Friday, July 02, 2010



¿Cuando mueren las hipótesis?

El año pasado alguien en el trabajo me preguntó si me parecía bien que Maradona fuera el técnico de la selección.
Yo contesté que como norma me parece mejor analizar el Currículum o antecedentes de alguien antes de darle una responsabilidad. O sea que para mí Maradona tenía pocos y malos antecedentes como entrenador y no convenía su nombramiento.

Por supuesto que la mayoría de los que me rodeaban dijeron que era bueno que estuviera el “Diego” dándome pocas razones o ninguna.

Siempre aposté a la formación de las personas.
En todos los campos de la vida.
Cuando veo a un alumno que desaprueba un examen veo un sistema que fracasa. Cuando ví a un grupo de chicos cortar una calle porque no tenían gas y luego golpear a un ciudadano, veo allí el fracaso de los docentes. Fracasaron porque no lograron hacerle ver a los alumnos que “la fuerza es el derecho de las bestias”. Sin racionalidad, el mundo nunca hubiera resuelto muchos de sus problemas.

Volviendo al tema del fútbol entonces me quedaría una nueva enseñanza o no.
Todo depende de los resultados del seleccionado.
Si Maradona logra mejor performance que otros técnicos entonces hay que asumir, por lo menos en fútbol, que ocuparse de dirigir equipos locales o del exterior no da experiencia. No será por lo tanto necesario hacer el curso de técnico ni tampoco experiencia previa. Otros factores serán más importantes. Quizás la motivación que da el técnico o las características individuales de los jugadores.

¿Podríamos extender el resultado del fútbol a la enseñanza en colegios o universidades?
¿Quién puede enseñar mejor?
¿Alguien con experiencia o solamente alcanzan las ganas?

Menciono el tema del fútbol porque este es un hecho social que todos podemos ver. No hay sesiones secretas de diputados ni reuniones privadas. Está todo a la vista. Los triunfos, los errores y las derrotas. No hay borradores que se arreglen mil veces hasta que queden “políticamente correctos”.
Es estar en el trapecio y sin red.