Ocaña: ¿Gestión o Genocidio?

Cuesta creer la impericia que ha mostrado el gobierno para encarar el tema de la gripe.

Todo fue y es política con minúscula. Política pequeña mirando sólo el tema electoral.

Desde la aparición del Dengue el gobierno no trepidó en esconder información. Desinformar a través de seudo-información. Empezó diciendo que sólo se trataba de un brote. ¡Cómo si los muertos por un brote fueran más sanos que los muertos por una epidemia! El pobre pueblo Chaqueño tuvo que soportar a una ministra y una dirigencia incapaz de manejar un Kiosco (con el respeto debido a los Kioscos).

Luego apareció la gripe A. Enseguida la esposa de Kirchner prohibió los vuelos a México.
¿Por qué?
Vaya uno a saber.
Quizás el presidente de México no es de su “palo ideológico”. No es defensor del pensamiento chavista.
Política Exterior pequeña y llena de miseria.

Ahora se quiere confundir a la gente diciendo que “se extienden las vacaciones”.
En lugar de declarar la emergencia, declaran que hay más vacaciones.

Dejo para el final lo de Ocaña. No tiene perdón. No tuvo la dignidad de dar una conferencia de prensa explicando los motivos de su alejamiento del Ministerio. Sólo salió raudamente del ministerio haciendo llamadas en su celular.
O quizás usando algún jueguito.

Yo en más de una oportunidad he dicho “no cuenten conmigo para esto”.
A veces no renunciar implica complicidad. Luego la persistencia transforma la complicidad en delito. No tengo nada personal contra esta persona; pero es responsable directa de la muerte de tanta gente. No quiero que vuelva en dos años como candidata a diputada lavándose las manos (como fue el caso de Ibarra).
Los K no han estado solos en esta serie de desaguisados. Es hora de enfocar la mira en los cómplices que tuvieron y han tenido.